Cuando un dálmata forma parte de tu vida y se convierte en familia, hay un proceso de cambio en todos los sentidos. Principalmente, te vuelves amante de las pequeñas cosas, como por ejemplo: sonreír al ver cómo interactúa con una mariposa, o tomar un café disfrutando de su compañía mientras observas cómo llueve por la ventana...

 

Si bien es cierto que, el mero hecho de incorporar un perro como miembro de una familia, ya supone un cambio en las familias, sobre todo a mejor, pues te impulsa a tener hábitos de vida saludables, entre muchas otras cosas... - ¿Paseamos?

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Sumar un dálmata a tu vida es plantear una auténtica revolución. Te permite hacer de todo junto a ellos y eso hace que sean unos compañeros de vida insuperables. Puedes llevarlos de ruta por montaña unas cuantas horas, puedes llevarlos por ciudad, te pueden acompañar de compras (si los comercios lo permiten) y un sin fín de planes que incluyen su compañía, ellos siempre estarán dispuestos. 

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Por eso me gusta decir, que es un estilo de vida en sí. Son muchos los propietarios de dálmatas que, como nosotros, hacemos mil planes y coincidimos, antes no hubiéramos imaginado nuestra vida así y ahora es imposible concebirla de otro modo. Tus planes de vacaciones pasarán a ser, en la mayoría de las ocasiones, planes donde puedas ir a explorar o vivir aventuras junto a tu perro. Querrás que tu dálmata descubra contigo mucho mundo y eso es maravilloso.

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Una buena educación y equilibrio en su vida hará que todo vaya rodado. No pienses que es una raza que debe estar todo el tiempo activa, al contrario, necesitan también su descanso. La ecuación podría ser más bien la siguiente:

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Dálmata feliz= actividad física diaria + actividad mental + cariño + descanso + alimentación adecuada.

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A más ejercicio, más resistencia y por lo tanto deberás ajustar la ecuación a sus necesidades, nosotros hemos vivido eso de "mi dálmata no se cansa, ya no se qué actividad hacer para darle más" y eso ¡es un error! Porque lo que hacemos es potenciar sus habilidades. Los dálmatas son perros que vienen con una genética predispuesta a la resistencia, por eso eran perfectos para acompañar a los aristócratas junto a sus carruajes, su versatilidad en múltiples deportes así como su gran capacidad como perro de rescate, por eso su asociación como perro Bombero. ¿Sabías que en la actualidad se realizan competiciones de Carriage Dog? Te sorprendería lo mucho que ofrecen estos maravillosos perros.

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